Ciencia y Tecnología :

Obsolescencia Programada


Documental tecnológico sobre el oportunismo  utilitarista de los fabricantes inescrupulosos (“capitalistas”) que crean productos con una Vida útil  limitada, para que se rompan antes de lo que podrían Durar. Y de como vivimos enfermos por las contingencias.




¿Ahora sí encontraron los científicos la partícula de Dios?

Es la comidilla en el medio científico: los investigadores de CERN están a punto de hacer un importante anuncio. ¿Están cerca de encontrar el bosón de Higgs? Si es así, se trata del primer gran                          

El descubrimiento del bosón de Higgs -llamado también "partícula de Dios"-, sería sin lugar a dudas el descubrimiento científico del siglo hasta ahora
 
Podría decirse que sería el mayor descubrimiento desde que Crick y Watson descubrieron la estructura del ADN cerca de 60 años atrás. Este martes investigadores del Large Hadron Collider (LHC), el mayor acelerador de partículas del mundo, dirán qué tan cerca están de ese descubrimiento cuando presenten los resultados de dos de los experimentos en la búsqueda de Higgs. 
 
Una cosa es segura, los investigadores no tendrán todos los datos que necesitan para hacer una declaración definitiva de que han descubierto la partícula subatómica. Pero en el escenario más optimista podrían estar muy cerca. 
 
Y hasta podrían sentir "en sus huesos" que la han encontrado, pero en privado. No lo llamarían descubrimiento en público. 
 
El bosón de Higgs es una partícula subatómica responsable de dar a todas la demás partículas su masa. Por lo tanto es crucial para nuestra comprensión del Universo. 
 
Existen dos experimentos para encontrar a Higgs de dos maneras completamente separadas: el Atlas y el CMS. Cada uno está buscando una señal de su presencia entre los miles de millones de colisiones que se están produciendo en cada uno de los experimentos. De forma gráfica aparecería como una pequeña punta en medio de todos los datos. 
 
Saltar de alegría
 
En este punto, cualquier punta que vieran podría ser una anomalía estadística y desaparecer con el tiempo mientras más información está siendo reunida en la siguiente ronda de colisiones que empieza el próximo año. Es por ello que nadie querrá decir que han descubierto la partícula Higgs en esta etapa, aun cuando encontrasen una punta tentadora en los gráficos.
 
A comienzos de marzo dispondrán de suficiente información para saber con certeza si la partícula existe o no, y en ese momento es cuando el descubrimiento o no-descubrimiento será oficial.
 
Pero existe un gran "pero". Si el martes ambos experimentos encuentran un gran pico en el mismo lugar y ese lugar es donde esperaban encontrar a Higgs, la tentación de saltar de alegría será irresistible hasta para el más desapasionado de los científicos. 
 
En este escenario, el profesor Rolf Heuer, director del CERN (la organización que dirige el LHC), estará obligado a decir que no es un descubrimiento definitivo. 
 
Es probable que diga que tenemos fuertes indicios de la existencia de la partícula y que espera que esto sea confirmado en 2012. Pero Heuer y sus colegas no pueden hacer ninguna otra declaración pública, por si estos picos se hacen más pequeños con el comienzo de la siguiente serie de colisiones. 
 
Otros dos escenarios                                                                  
 
Es posible que ningún experimento encuentre ninguna señal en el rango donde se espera descubrir a Higgs. Esto también es increíblemente interesante. De hecho es mucho más interesante que encontrarla. 
 
Esto sería una muy fuerte señal de que, en contra de la predicción del llamado modelo estándar de la física actual, Higgs no existe. 
 
De nuevo, los científicos del LHC tampoco podrán descartarlo con seguridad. Pero, en sus corazones sabrán que en unos pocos meses una parte importante de nuestra actual teoría de la física acerca de las partículas irá a la basura. 
 
Entusiasmo
 
En este caso también el profesor Heuer y sus colegas harán piruetas en la intimidad de sus oficinas. 
 
La tercera posibilidad y la más ambigua es si los resultados de cada experimento son sustancialmente diferentes. En ese caso deberemos esperar hasta marzo para saber si Higgs existe o no. 
 
El significado del descubrimiento de la partícula no puede ser exagerado. Una vez que los científicos sepan si existe pueden empezar a estudiar en detalle y descubrir si hay diferentes tipos de bosones de Higgs. Y más importante aún, los teóricos de la física podrán descartar varias alternativas al modelo estándar y avanzar en él tratando de desarrollarlo aún más. 
 
A pesar de lo exitoso que el Modelo Standard ha sido, aun no abarca la gravedad. Ni tampoco brinda una razón sobre por qué hubo un exceso de materia sobre la antimateria después del Big Bang, permitiendo al Universo tener existencia. La teoría da cuenta de sólo el 4% del Universo -la materia normal- y el resto, en forma de materia oscura y energía oscura, queda por ser explicado. 
 
Sin embargo, si la existencia de la partícula de Higgs es descartada, la vida se vuelve más interesante. Ya que significa que la piedra angular que sostiene al Modelo Standard no existe, pavimentando el camino para nuevas y más exóticas teorías. 
 
Pase lo que pase el martes, el descubrimiento o no-descubrimiento de la partícula de Higgs marcará sólo el fin del comienzo de un nuevo capítulo en la física. 
 
Así cómo nuestra comprensión del universo y nuestro lugar en él fue alterado al conocer la estructura del átomo y las ecuaciones espacio-tiempo de Albert Einstein, los descubrimientos de los próximos 50 años serán, sospecho, aún más importantes.



El Cerebro no está hecho para responder simultáneamente a las exigencias de la era digital

Uno de los requisitos para muchos trabajadores en el mercado laboral moderno es tener la habilidad de poder realizar tareas múltiples simultáneamente (lo que en inglés llaman multi-tasking).
El poder sostener una conversación telefónica mientras se lee un correo electrónico al tiempo que se envía un mensaje de twitter es un escenario común hoy en día. Y todo eso se lleva a cabo en medio de un creciente e ilimitado océano de información que nos llega en todas direcciones y estimula todos los sentidos.

Pero el cerebro humano no está hecho para funcionar eficientemente en ese entorno, coinciden la mayoría de los expertos, y esperar a que evolucione para hacerlo probablemente tomaría decenas de miles de años.
Así que lo que nuestra “central de comando” está haciendo es rediseñando sus funciones para adaptarse a las realidades de la era digital. Pero hay que hacerlo con equilibrio, advierten los neurólogos.

Lo uno por lo otro

“Técnicamente no podemos dar igual atención a dos tareas cognitivas exigentes”, afirmó a BBC Mundo Edward Hallowell, autor y psiquiatra de niños y adultos con consultorios en Nueva York y Boston.
Hallowell dice que cuando alguien se refiere a hacer tareas múltiples simultáneas, lo que está haciendo es cambiar rápidamente su foco de atención de una tarea a otra.
Reconoce que actividades relativamente sencillas como caminar y hablar se pueden realizar al mismo tiempo pero, en el momento en que se vuelven más complejas se diluye el poder de concentración.
“No podemos leer a Shakespeare y aprender física cuántica al mismo tiempo”, sentenció.

Mejoras de aprendizaje

La doctora Ladan Shams, experta en integración multisensorial de la Universidad de California, en Los Ángeles, coincide en que el multi-tasking afecta el proceso de aprendizaje en tareas que requieren atención completa. En unos casos no se aprende y en otros el aprendizaje no es robusto.
“Pero, recientemente, hemos visto que otros tipos de aprendizaje sí se benefician del multi-tasking”, señaló la neurocientífica.
“Algunas mejoras pueden ocurrir en procesos sensoriales cuando el estímulo es subliminal y el individuo está ocupado en otra tarea”.
Un ejemplo de esto puede ser cuando un ejecutivo encuentra que puede dictar un memorando con mayor facilidad si está arrojando una pelotita al aire y atrapándola una y otra vez.
Lo que parecería que está sucediendo es que una parte del cerebro que podría distraer al individuo de su principal tarea está siendo ocupada por la actividad de arrojar las pelotitas, teniendo el efecto de aumentar su concentración en el dictado.
“También hemos encontrado que tres tipos de aprendizaje pueden ocurrir simultáneamente”, indicó la doctora Shams.
En un experimento sometieron a sujetos a escuchar una secuencia de sonidos al tiempo que veían una serie de formas en una pantalla.
Los sujetos pudieron aprender las secuencias auditivas y las secuencias visuales, así como aprender a asociar las formas con los sonidos.
“En otras palabras, tres tipos de aprendizaje ocurrieron simultáneamente sin que hubiese una reducción comparado a cuando se les presentó cada estímulo (auditivo o sonoro) individualmente”, explicó la doctora.

Malabares

No obstante, para el psiquiatra Edward Hallowell, todo depende de la cantidad de información que se esté manejando.
“Tome un operador de una torre de control. Ellos están poniendo atención a todo tipo de información al tiempo que dirigiendo a los pilotos para que aterricen sanos y salvos”, expresó. “Llega un momento en que si tienen demasiados aviones, no pueden hacerlo”.
“Hay un límite a la cantidad de bolas que un malabarista puede mantener en el aire”, recalcó.
La neurociencia señala que nuestro cerebro evolucionó para un mundo muy diferente al que habitamos ahora. No está optimizado para realizar muchas de las tareas que enfrentamos, ya sea computar cálculos numéricos o recordar los nombres de todas las personas que conocemos diariamente.
Tampoco está diseñado para absorber y almacenar las masivas cantidades de información a la que estamos expuestos hoy en día.
Pero no podemos esperar a que el cerebro evolucione físicamente para desarrollar mecanismos que le permitan manejar la marejada de información. Eso tomaría decenas de miles de años.
“Lo que se es más probable es que aprendamos a adaptar nuestras presentaciones de información para explotar las capacidades ya existentes del cerebro”, aseguró Ladan Shams.

Neuroretroalimentación

Esa es la filosofía (y la ciencia) que está detrás de los que hace el Dr. Eran Zeidel, colega de Shams en la Universidad de California.
“El cerebro básicamente es producto de un hojalatero más que de un ingeniero”, afirmó Zeider a BBC Mundo. “Como no podemos esperar a que evolucione, tenemos que rediseñarlo y tenemos cómo hacerlo”.
El doctor Zeidel trabaja sobre una forma de bioretroalimentación para el cerebro que llama neuroretroalimentación.
De la misma manera en que se pueden modificar funciones corporales -como la presión arterial- a través de la conversación placentera con un paciente, igualmente se pueden alterar las frecuencias del cerebro.
“Pasó de afectar el sistema nervioso periférico (con la bioretroalimentación) a cambiar el sistema nervioso central (con la neuroretroalimentación)”, continuó.
“Con la neuroretroalimentación puedo cambiar el estado del cerebro a lo que quiera y eso abre las puertas a cómo procesamos la información”, manifestó Zeidel.
Eso permitiría, por ejemplo, que el cerebro podría utilizar filtros para descartar la información que no considera necesaria para la tarea que está desempeñando, liberando así otros espacios y volviéndolo más potente.
“Estamos desarrollándonos en nuevas maneras creativas, fantásticas e interesantes”, comentó al respecto el psiquiatra Edward Hallowell.
“Estamos desarrollando nuevas redes neuronales para procesar información rápidamente”, dijo. “Pero lo que añadimos en velocidad perdemos en profundidad”.
Hallowell advierte que no debemos perder de vista cuando se necesita concentración. “Cuando necesitamos concentrarnos debemos abandonar las tareas múltiples”.
“Si vamos manejando un auto, escuchando música, y nos perdemos, ¿qué hacemos?”, se pregunta. “Bajamos la música para recuperar la concentración”.